Mes del Bonarda
Por segundo año consecutivo se celebra la semana del Bonarda, desde el 2 al 8 de Agosto. Es una iniciativa del Fondo Vitivinícola, el cual reúne distintas bodegas y gente referente del sector con el objetivo de difundir este varietal, ya que es la segunda variedad más plantada en nuestro país después del Malbec. Durante esta semana se realizarán actividades presenciales y virtuales en Mendoza y otras provincias como Salta, Buenos Aires y San Juan, además se podrán encontrar descuentos en las vinotecas de todo el país.
Es una gran oportunidad para conocer más a fondo este singular varietal, llamado Corbeau en Francia. Llegó a nuestro país en el siglo XIX, principalmente en Cuyo. Debido a sus características organolépticas fue ganando terreno, además al poseer un alto rendimiento, lo cual permite lograr un precio más competitivo en el mercado. Esta interesante cepa proveniente del Piamonte italiano o de la cepa francesa corbeau noir es hoy por hoy la uva de mayor proyección en Argentina. Por muchos años se utilizó como base para producción de vinos de corte (mezcla de diversas uvas), pero dadas sus inigualables características, ahora es la segunda cepa más plantada en Argentina.
Es una variedad bastante difícil de obtener. Tiene un ciclo de maduración muy largo. Hay que llegar a un punto de madurez alto de la fruta para lograr un buen vino.
La bonarda, que se cultiva en Argentina desde hace muchos años, se aclimató a la perfección en aquel país sudamericano. Mientras que en 1936 se registraba un cultivo de 6,000 hectáreas, para el año 2001 ya se superaban las 15,000, por debajo únicamente de la tradicional uva malbec.
Los vinos producto de esta uva son armoniosos, con taninos elegantes y atractivos aromas a frutos negros, cedro y de forma muy específica, helecho. Un buen vino bonarda se caracteriza a la vista por su color rojo rubí intenso con tonalidades violáceas y púrpuras. En la nariz es intenso y se encuentran aromas a frutos del bosque maduros (moras, cassis y cerezas) con atrayentes toques especiados. En boca su ataque es agradable y de buena intensidad. Una de las características más importantes se ve expresada en la suavidad de los taninos bien maduros amalgamados con la fruta.
Este vino se puede beber sin problemas a unos 15-16 grados.
Te mostramos tres bonardas de diferentes zonas:
Pala Corazón Bonarda
Este vino proviene de la Zona Este, más precisamente de Junín, posee sus viñedos a una altura que ronda entre los 700 y 800 m.s.n.m. Esta característica le permite alcanzar la madurez adecuada y adquiere lo necesario para expresarse a nivel sensorial.
Riccitelli Bonarda
La bodega está asentada en el corazón de Vistalba, Luján de Cuyo, con viñedos situados entre 1000 y 1100 msnm. La crianza se realiza en barricas de roble francés de diferentes usos durante 16 meses.
Paso a Paso Bonarda
San Carlos - El Cepillo
En climas más extremos, climas fríos y zonas altas de Mendoza como el Valle de Uco, la Bonarda no madura adecuadamente y esto requiere manejarlo de otra manera, pero esta particularidad logra como resultado un vino de color más profundo y con una acidez excepcional.
Marida estas singulares opciones con:
-Gigot de cordero braseado con salsa de frutos rojos y puré de boniato a la naranja.
-Pastelitos de ojo de bife braseado con dip de salsa criolla
-Malfatti de cordero con salsa romesco
Podés disfrutar estas exquisitas opciones y más en La Sala Maridajes
Encontrá estos y más vinos en nuestro local: Sarmiento 664, Mendoza o en nuestra tienda online https://www.solyvinomendoza.com/es/
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