Para el proyecto, Constantino Krontiras, convocó a su amigo y reconocido enólogo griego Panos Zouboulis, quien obtuvo su Diploma Nacional de Enología en Bordeaux y que cuenta con más de 25 años de experiencia en la elaboración de vinos en el viejo mundo.
“Mientras que en Grecia elaboramos vinos con cepas autóctonas ideales para cada terroir, en Mendoza contamos con la altitud y el clima óptimos que, conjugados con la edad de los viñedos nos permite lograr la mejor expresión de la cepa Malbec” Panos Zouboulis
Bajo la filosofía del equilibrio ambiental, y el uso eficiente de los recursos del ecosistema local y de los nutrientes disponibles, se inició el tratamiento orgánico de los viñedos y se comenzaron los primeros pasos para la biodinámica, tecnología que también se aplicará en la elaboración de sus vinos.
El emprendimiento cuenta con un viñedo de una superficie de 10 hectáreas en Lujan de Cuyo con vides de más de 80 años de edad y otro de 18 hectáreas de viñedos nuevos en Maipú, Mendoza.