En los años '30 del siglo pasado, "Don Domingo" había hecho famoso un corte tinto que se comercializaba en Buenos Aires en los restaurantes más reconocidos de la época. "Lograba su vino con la mejor fruta de sus viñas de Maipú y Rivadavia, a las que agregaba también uvas oscuras y concentradas de su viñedo del Valle de Uco, por aquel entonces casi desconocido para el resto de los bodegueros". Por tanto, se trata de una reedición histórica de "ese aclamado vino, un blend de Malbec y Petit Verdot".
Ambas etiquetas exiben orgullosas las leyendas de "Blanco Histórico" y "Tinto Histórico". Pero el tercer vino de la línea D. V. Catena Apelación tiene su propia historia, pero en este caso por la presencia de una cepa como la Garnacha, a la que siempre se la trató despectivamente pero que hay que decirlo, Alejandro Vigil le ha encontrado una elegancia que se lo pone a a altura, por ejemplo, de un típico Pinot Noir.
Recordamos que la bodega ya había incursionado con un D. V. Catena Clarete, también para homenajear a "Don Domingo", pero ahora redobla la apuesta con un varietal ciento por ciento Garnacha con Apelación Lunlunta. Esta palabra, en lengua huarpe, significa "piedra que cae". La zona se extiende a lo largo del curso del río Mendoza, "al norte de las colinas del mismo nombre, entre Luján de Cuyo y Maipú".